Como era de esperar, mi Pequeña Barriguda se porto como una auténtica campeona. No me falló nada, ni siquiera hubo que cambiar ninguna bujía.
"Compitiendo" contra dos Montesa Impala Comando, una Impala Turismo, una MV Sella 150, una Ducati Scrambler y una Ducati 24 Horas y la más pequeña de todas, la Mercurio, no dió ni el más mínimo signo de fatiga en los mil quilómetros recorridos en tres días y medio de aventura. Estoy orgullosísimo de ella. Lo comentaba con mi hermano Moncho, que pilotaba la MV; me decía que podía estar contento, ya que mi Mercurio fue la última en restaurar de todas ellas y casi no estaba rodada (apenas 350 Kms).
En fin fue una experiencia inolvidable, no solo por que todo saliera bien con la Mercu, sino por todo lo que pasamos juntos, las anécdotas, las risas, los enfados, ...
Ahora toca volver a la realidad, todo lo bueno se acaba, pero queda el recuerdo que es lo importante. Y como recuerdo os dejo unas fotos de la Pequeña Barriguda en distintos lugares.
A ella, le toca una limpieza a fondo y un buen descanso. SE LO MERECE...
Si queréis echar un vistazo a mi blog allí iré colgando las crónicas de cada etapa (no me parece buena idea contar todo aquí, ya que Mercurio solo estaba la mía).

Uploaded with ImageShack.us

Uploaded with ImageShack.us

Uploaded with ImageShack.us

Uploaded with ImageShack.us

Uploaded with ImageShack.us
______________________________________________________
HTTP://vespinomotoreina.blogspot.com
